Baja probabilidad de que se produzca un episodio intenso de El Niño este año
Conforme a un nuevo Boletín El Niño/La Niña hoy de la Organización Meteorológica Mundial, que se basa en modelos de predicción y en la interpretación de expertos de todo el mundo, es poco probable que se produzca un episodio intenso de El Niño en 2019.
Conforme a un nuevo Boletín El Niño/La Niña hoy de la Organización Meteorológica Mundial, que se basa en modelos de predicción y en la interpretación de expertos de todo el mundo, es poco probable que se produzca un episodio intenso de El Niño en 2019.
La temperatura de la superficie del mar en el océano Pacífico tropical estaba en niveles cercanos a un episodio de El Niño o correspondientes a un episodio débil de El Niño en abril y principios de mayo de 2019. También se han dado condiciones atmosféricas típicas de ese fenómeno.
Se pronostican temperaturas oceánicas que permanecerán cercanas a los niveles actuales durante el período de junio a agosto, pero que podrían atenuarse en el período de septiembre a noviembre. Dadas las condiciones actuales y las proyecciones de los modelos, se calcula que la probabilidad de que tenga lugar un episodio de El Niño durante el período de junio a agosto de 2019 sea de entre el 60 % y el 65 %, disminuyendo al 50 % a partir de septiembre de 2019.
Es muy probable que la temperatura superficial en las partes oriental y central del Pacífico tropical sea entre unos 0,5 y 0,9 grados Celsius superior a la media durante el período de junio a agosto de 2019. Aunque durante los próximos meses las condiciones oceánicas se mantengan en niveles propios de un episodio de El Niño, es poco probable que se produzca un episodio de fuerte intensidad (aumento de la temperatura superficial del mar en las partes oriental y central del Pacífico tropical como mínimo de 1,5 grados Celsius por encima de la media) durante este período. Es muy poco probable que se produzca un episodio de La Niña.
Las predicciones que se realizan en este momento del año son inciertas a partir de julio y agosto y deben tenerse en cuenta con precaución.
Se prevé que las temperaturas de la superficie del mar superiores a la media que se están dando en amplias zonas del globo, tanto en los trópicos (debido al episodio débil de El Niño en el Pacífico) como en las regiones extratropicales, contribuyan a que se den temperaturas terrestres por encima de lo normal, particularmente en las latitudes tropicales, en junio, julio y agosto. La tendencia al calentamiento global también contribuye a las temperaturas previstas de la superficie del mar y del aire, según el Boletín sobre el clima estacional mundial de la OMM publicado al mismo tiempo que el Boletín El Niño/La Niña hoy.
Algunas de las anomalías de las precipitaciones estacionales a gran escala previstas sobre la superficie terrestre se corresponden con las características clásicas de El Niño, como son la probabilidad de precipitaciones por debajo de lo normal en gran parte del archipiélago de Indonesia, América Central y el Caribe, y precipitaciones por encima de lo normal en parte del sureste de América del Sur, según el Boletín sobre el clima estacional mundial, que actualmente se está utilizando como producto preoperativo de prueba.
El Niño/Oscilación del Sur (ENOS) es un fenómeno natural caracterizado por la fluctuación de las temperaturas de la superficie del océano en el Pacífico ecuatorial, asociada a cambios en la circulación de la atmósfera suprayacente. Se trata de un fenómeno que ejerce una gran influencia en las condiciones meteorológicas y climáticas de numerosas partes del mundo, y está vinculado a peligros como lluvias fuertes, crecidas y sequías. El ENOS incide, asimismo, en la temperatura a escala mundial, e incluso un episodio débil de El Niño tiene un efecto de calentamiento. Así, 2016 fue el año más cálido del que se tenga registro debido a un intenso episodio de El Niño en el período 2015/2016, sumado al cambio climático a largo plazo. El cambio climático ha provocado un aumento de las temperaturas del aire y de la superficie del mar, así como el calor oceánico. Más del 90 % de la energía atrapada por los gases de efecto invernadero acaba en el océano y, por ese motivo, el contenido calorífico de los océanos (capa superior hasta 2 000 m) alcanzó nuevos niveles récord en 2018.
Es importante tener en cuenta que El Niño y La Niña no son los únicos factores que condicionan las características climáticas a escala mundial, y que la intensidad del fenómeno ENOS no se corresponde sistemáticamente con la de los efectos. Por ese motivo, la OMM ha comenzado a elaborar el Boletín sobre el clima estacional mundial, en el que también se consideran otros condicionantes climáticos, como el dipolo del océano Índico, y que está basado en predicciones efectuadas a partir de modelos climáticos de los distintos Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM, actualmente en fase preoperativa.
El Boletín El Niño/La Niña hoy de la OMM se basa en modelos de predicción y en la interpretación de expertos de todo el mundo, y es uno de los recursos que utilizan los planificadores del sistema de las Naciones Unidas. Asimismo, complementa la información proporcionada por los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales y los Centros Regionales sobre el Clima de la OMM a la que recurren los organismos de gestión de desastres para fines de adopción de decisiones a nivel nacional, los encargados de cuestiones de planificación en sectores sensibles al clima y los gobiernos.
La Organización Meteorológica Mundial es el portavoz autorizado de las Naciones Unidas sobre el tiempo, el clima y el agua
Para más información, diríjase a: Clare Nullis, agregada de prensa. Correo electrónico: cnullis@wmo.int Teléfono móvil: +41 79 709 1397
Centros acreditados por la OMM elaboran regularmente predicciones estacionales a escala mundial, incluidas predicciones de la precipitación y la temperatura en superficie, mediante sofisticados modelos acoplados atmósfera-océano que tienen en cuenta el fenómeno ENOS así como otros condicionantes climáticos. En la actualidad, hay 13 Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM, cuyos productos consolida un Centro Principal de Predicción a Largo Plazo mediante Conjuntos Multimodelos (https://www.wmolc.org/).
Enlaces para acceder a los sitios web de los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales
Información y enlaces a sitios web de Centros Regionales sobre el Clima de la OMM
Archivo con todos los boletines El Niño/La Niña hoy disponibles
Notas a los editores
Conforme a un nuevo Boletín El Niño/La Niña hoy de la Organización Meteorológica Mundial, que se basa en modelos de predicción y en la interpretación de expertos de todo el mundo, es poco probable que se produzca un episodio intenso de El Niño en 2019.
La temperatura de la superficie del mar en el océano Pacífico tropical estaba en niveles cercanos a un episodio de El Niño o correspondientes a un episodio débil de El Niño en abril y principios de mayo de 2019. También se han dado condiciones atmosféricas típicas de ese fenómeno.
Se pronostican temperaturas oceánicas que permanecerán cercanas a los niveles actuales durante el período de junio a agosto, pero que podrían atenuarse en el período de septiembre a noviembre. Dadas las condiciones actuales y las proyecciones de los modelos, se calcula que la probabilidad de que tenga lugar un episodio de El Niño durante el período de junio a agosto de 2019 sea de entre el 60 % y el 65 %, disminuyendo al 50 % a partir de septiembre de 2019.
Es muy probable que la temperatura superficial en las partes oriental y central del Pacífico tropical sea entre unos 0,5 y 0,9 grados Celsius superior a la media durante el período de junio a agosto de 2019. Aunque durante los próximos meses las condiciones oceánicas se mantengan en niveles propios de un episodio de El Niño, es poco probable que se produzca un episodio de fuerte intensidad (aumento de la temperatura superficial del mar en las partes oriental y central del Pacífico tropical como mínimo de 1,5 grados Celsius por encima de la media) durante este período. Es muy poco probable que se produzca un episodio de La Niña.
Las predicciones que se realizan en este momento del año son inciertas a partir de julio y agosto y deben tenerse en cuenta con precaución.
Se prevé que las temperaturas de la superficie del mar superiores a la media que se están dando en amplias zonas del globo, tanto en los trópicos (debido al episodio débil de El Niño en el Pacífico) como en las regiones extratropicales, contribuyan a que se den temperaturas terrestres por encima de lo normal, particularmente en las latitudes tropicales, en junio, julio y agosto. La tendencia al calentamiento global también contribuye a las temperaturas previstas de la superficie del mar y del aire, según el Boletín sobre el clima estacional mundial de la OMM publicado al mismo tiempo que el Boletín El Niño/La Niña hoy.
Algunas de las anomalías de las precipitaciones estacionales a gran escala previstas sobre la superficie terrestre se corresponden con las características clásicas de El Niño, como son la probabilidad de precipitaciones por debajo de lo normal en gran parte del archipiélago de Indonesia, América Central y el Caribe, y precipitaciones por encima de lo normal en parte del sureste de América del Sur, según el Boletín sobre el clima estacional mundial, que actualmente se está utilizando como producto preoperativo de prueba.
El Niño/Oscilación del Sur (ENOS) es un fenómeno natural caracterizado por la fluctuación de las temperaturas de la superficie del océano en el Pacífico ecuatorial, asociada a cambios en la circulación de la atmósfera suprayacente. Se trata de un fenómeno que ejerce una gran influencia en las condiciones meteorológicas y climáticas de numerosas partes del mundo, y está vinculado a peligros como lluvias fuertes, crecidas y sequías. El ENOS incide, asimismo, en la temperatura a escala mundial, e incluso un episodio débil de El Niño tiene un efecto de calentamiento. Así, 2016 fue el año más cálido del que se tenga registro debido a un intenso episodio de El Niño en el período 2015/2016, sumado al cambio climático a largo plazo. El cambio climático ha provocado un aumento de las temperaturas del aire y de la superficie del mar, así como el calor oceánico. Más del 90 % de la energía atrapada por los gases de efecto invernadero acaba en el océano y, por ese motivo, el contenido calorífico de los océanos (capa superior hasta 2 000 m) alcanzó nuevos niveles récord en 2018.
Es importante tener en cuenta que El Niño y La Niña no son los únicos factores que condicionan las características climáticas a escala mundial, y que la intensidad del fenómeno ENOS no se corresponde sistemáticamente con la de los efectos. Por ese motivo, la OMM ha comenzado a elaborar el Boletín sobre el clima estacional mundial, en el que también se consideran otros condicionantes climáticos, como el dipolo del océano Índico, y que está basado en predicciones efectuadas a partir de modelos climáticos de los distintos Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM, actualmente en fase preoperativa.
El Boletín El Niño/La Niña hoy de la OMM se basa en modelos de predicción y en la interpretación de expertos de todo el mundo, y es uno de los recursos que utilizan los planificadores del sistema de las Naciones Unidas. Asimismo, complementa la información proporcionada por los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos Nacionales y los Centros Regionales sobre el Clima de la OMM a la que recurren los organismos de gestión de desastres para fines de adopción de decisiones a nivel nacional, los encargados de cuestiones de planificación en sectores sensibles al clima y los gobiernos.
La Organización Meteorológica Mundial es el portavoz autorizado de las Naciones Unidas sobre el tiempo, el clima y el agua
Para más información, diríjase a: Clare Nullis, agregada de prensa. Correo electrónico: cnullis@wmo.int Teléfono móvil: +41 79 709 1397
Centros acreditados por la OMM elaboran regularmente predicciones estacionales a escala mundial, incluidas predicciones de la precipitación y la temperatura en superficie, mediante sofisticados modelos acoplados atmósfera-océano que tienen en cuenta el fenómeno ENOS así como otros condicionantes climáticos. En la actualidad, hay 13 Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la OMM, cuyos productos consolida un Centro Principal de Predicción a Largo Plazo mediante Conjuntos Multimodelos (https://www.wmolc.org/).
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La Organización Meteorológica Mundial (OMM) es un organismo especializado de las Naciones Unidas encargado de promover la cooperación internacional en ciencias atmosféricas y meteorología.
La OMM monitorea el tiempo, el clima y los recursos hídricos y brinda apoyo a sus Miembros en materia de pronóstico y mitigación de desastres. Con su labor, la Organización respalda firmemente el fomento de los conocimientos científicos, el refuerzo de la seguridad pública
y el aumento del bienestar.